El arte en la calle

(Del 18 de marzo al 6 de julio de 2025)

La exposición «El arte en la calle», en el Museo de Orsay del 18 de marzo al 6 de julio de 2025, repasa un fenómeno fundamental de la sociedad contemporánea, la inflación de imágenes en el espacio público. Las novelas ilustradas con grandes grabados, los dibujos cómicos en la prensa de espectáculos y los carteles publicitarios hacían funcionar las rotativas. Se creó toda una cultura en el teatro y pronto en el cine, basada en los grandes éxitos editoriales. El imaginario mediático resultante contribuyó a forjar nuestras imágenes del crimen, de las fronteras coloniales y de las relaciones entre los sexos, en las que los arquetipos tomaban una forma de vida.

Bal du Moulin rouge, 1889, Jules Chéret, Bibliothèque nationale de France.

Muros pintados, carteles, columas «Morris» animan la ciudad moderna. A medida que las capitales crecían, también lo hacía la proliferación de imágenes, contribuyendo a configurar la identidad nacional, política y cultural de los franceses. El sueño del consumo de masas perseguido por el capitalismo rampante añade una nueva capa de imágenes a los muros de París. ¿Cómo surgió el mito de la «ciudad espectáculo»? Cuando las imágenes de la ciudad invitan a un viaje permanente, entre la conmemoración republicana y la locura turística.

La Rue, 1896, Théophile Alexandre Steinlen, Bibliothèque nationale de France.

La exposición El arte en la calle ofrece una mirada fresca y dinámica sobre la nueva imaginería urbana del periodo comprendido entre finales del siglo XIX y el estallido de la Primera Guerra Mundial en Francia. Mientras el cartel en color se desplegaba en las paredes de la capital, los carteles publicitarios se multiplicaban para celebrar la fantasmagoría de la ciudad comercial, la sociedad del espectáculo y las Exposiciones Universales. La producción masiva de imágenes e impresos contribuyó al auge de la cultura de masas y de los medios de comunicación.

Quai Saint-Michel y Notre-Dame, 1901,
Maximilien Luce, Museo de Orsay.

«Donde no hay iglesia, miro los carteles», declaraba Victor Hugo. Sin esperar a la renovación urbana del barón Haussmann, los muros parisinos se cubrieron de letras, rótulos de tiendas y grafitis. Artistas como Gustave Doré, Camille Pissarro, Maximilien Luce y Raoul Dufy aprovecharon esta nueva oportunidad comercial e hicieron su aportación al libro ilustrado al aire libre que es París.